Entra en el reino misterioso donde la historia aparente choca con la ciencia de vanguardia, descubriendo el eigma de la resurrección del faraón Ramsés. En 1981, cuando Fraçois Mitterrad ascendió a la presidencia francesa, una solicitud extraordinaria para examinar la momia del faraón famoso preparó el escenario para una exploración científica sin precedentes en el Centro de Arqueología de Francia.
En medio de ceremonias reales y en presencia del presidente francés, el profesor Maυrice Bυcaille dirigió un equipo de científicos de primer nivel en una búsqueda para descifrar los secretos de este gobernante tan atractivo. La sorprendente revelación, revelada en un informe de última hora de la noche, sugería una historia de inmersión en el mar, rescate y embalsamamiento inmediato, lo que dejó al profesor Marrice desconcertado por la extraordinaria conservación.
A medida que se desarrollaba la saga científica, llegaron al profesor Mauricio rumores sobre afirmaciones musulmanas sobre el ahogamiento de la momia. Una mente escéptica cuestionó la posición hasta que profundizó en el Corán, un libro de 1400 años de antigüedad que describía de manera intrincada la muerte del faraón y la preservación milagrosa de su cuerpo como un signo divino de la humanidad.
Atrapado en un torbellino de sicropicidad histórica, el profesor Mauricio preguntó si la momia que tenía delante era la implacable perseguidora de Moisés y si Mahoma poseía conocimientos anteriores a los descubrimientos modernos de los siglos. El silencio del Antiguo Testamento ante los detalles de la preservación ilustró aún más el misterio.
Al regresar a Francia, el profesor Mauricio dedicó una década a analizar las revelaciones científicas a la luz del Corán. Su recopilación, haciéndose eco del Corán 41:42, no sólo afirmó la sabiduría del Corán, sino que también provocó conmociones en toda Europa con el libro “Corá, Torá, Biblia y ciencia: un estudio de los libros sagrados a la luz de la ciencia moderna”.
Vaya al corazón de esta fascinante odisea, donde la resurrección del faraón Ramsés se convierte en un testimonio de la interacción de la historia, la fe y la curiosidad científica. Mientras los turistas acuden en masa al Museo de El Cairo, maravillándose de la atractiva momia, la lección más profunda permanece oculta: un signo profundo para aquellos que niegan la existencia de un poder superior y los mensajes entregados a través de Sus mensajeros.