Se ha confirmado que la antigua leyenda taiwanesa sobre personas “bajas y de piel oscura” que vivían en montañas remotas y desaparecían repentinamente era cierta tras el descubrimiento de los restos de una mujer “negriota” en un cueva que data de hace 6.000 años.

Las tribus indígenas de la nación han compartido durante mucho tiempo historias sobre cazadores-recolectores de pequeña estatura que ya estaban asentados cuando llegaron hace 4.800 años, pero la falta de evidencia ha envuelto a este grupo en un misterio durante varios cientos de años.

Un análisis de ADN en el cráneo muestra que se acerca a muestras africanas y que las características del cráneo se parecen a los Negritos de Filipinas y Sudáfrica, quienes son bien conocidos por su baja estatura y su pequeño tamaño corporal.

Los arqueólogos también descubrieron fémures de la mujer, lo que sugiere que medía cuatro pies y seis pulgadas de alto.

Aún no se sabe qué pasó con este antiguo grupo, pero los investigadores que colaboraron con el estudio sugieren que la llegada de los pueblos austronesios podría haber conducido al declive y desaparición de los Negritos en Taiwán.

“El término ‘Negrito’, personita negra, es una diмinutiʋe española de negro, utilizada por primera vez por los misioneros españoles del siglo XVI para describir a los cazadores-recolectores de Filipinas”, se lee en el estudio publicado en World Archaeology.

“Dado que los grupos negritos se caracterizan por su baja estatura, piel oscura y cabello rizado, todos los grupos de un fenotipo similar en la región vecina, incluidos los Mani (Maniq) en el sur de Tailandia, los grupos Seмang en Malasia Peninsular y los Andaмanos En las Islas Andaman a menudo se los identifica como los Negritos.’

Hay 16 grupos austronesios reconocidos en Taiwán y todos menos uno tienen leyendas similares sobre el pueblo negrito.

Las leyendas sobre los aparentes “Negritos” de Taiwán se recopilaron durante tres períodos culturales importantes: la dinastía Qing china de 1683 a 1895, el período de dominio japonés de 1895 a 1945 y luego la era posterior a 1945.

Varios documentos de la dinastía Quin han mencionado la existencia de “personas de baja estatura y piel oscura” en la isla, señalando que hablaban un idioma diferente y sólo se casaban entre sí.

Durante el período japonés, los eruditos recopilaron e interpretaron los cuentos sobre el pueblo negrito a través de investigaciones de campo entre las tribus austronesias: se recopilaron un total de 25 de estas leyendas en Taiwán.

Después de 1945, este tema atrajo más atención y el número de historias recopiladas aumentó a 258 gracias a investigaciones de campo lingüísticas y etnológicas.

Los grupos austronesios, sin embargo, diferían en opiniones sobre Negritos.

Algunos de los triƄes indígenas “los veían como sus antepasados, mientras que otros los veían como “extraños y enemigos”, describe el estudio.

Una trilogía, los Saisiyat, afirman que aprendieron medicina, canto, danza y otros rituales de quien llamaban Ta’ai.

Hace más de 1.000 años, los Saisiyat 𝓀𝒾𝓁𝓁 convirtieron lo que creían en la última aldea de Negritos en una batalla contra las mujeres, y los triƄe todavía sienten la culpa de las acciones de sus antepasados.

Los Saisiyat forzaron una batalla, arrinconando a tanta gente en un puente que el trío entero se ahogó cuando los guerreros lo arrojaron a un río de montaña de rápido flujo Chu Fung-lu, maestro de ceremonias para el monumento celebrado en la aldea de Wufeng en lo profundo de las montañas del centro Taiwán, dijo a Reuters.

Los restos de la mujer fueron encontrados dentro de uno de los cuevas de Xiaoмa más grandes que se encuentran en la costa este de la isla.

También en las capas de tierra se encontraron depósitos de cerámica del Neolítico y hallazgos de la Edad del Hierro que datan de hace entre 2.000 y 6.200 años.

La posición de los restos de la mujer sugiere que fue enterrada en cuclillas, lo que coincide con otros métodos de cazadores-recolectores en el sur de China y el sudeste asiático desde el Paleolítico tardío (hace 50.000 a 12.000 años) hasta el Mesolítico (hace 10.000 a 20.000 años). ) y el Precerámico, que comenzó hace 4.000 años.

Los arqueólogos determinaron el 𝓈ℯ𝓍 a través del cráneo, ya que la pelʋis no era fácil de analizar.

“Se determinó que el individuo era mujer debido al cráneo grácil, los pequeños procesos mastoideos, el área de inserción del músculo occipital liso, el frente perpendicular y elevado, y el contorno suave de la fase mandiƄular”, según el estudio.

Se cree que la población negra está ligada a la “primera capa” de humanos anatómicamente modernos que muestran un mayor parecido con los africanos que con los euroasiáticos actuales, que representan la “segunda capa”.