En una escena cargada de tensión y palabras al límite, Anuel AA y Ovi protagonizaron —según este relato dramatizado con elementos de ficción— un choque verbal que dejó a Miami en silencio por segundos. El encuentro ocurrió de manera inesperada y rápidamente escaló cuando Anuel, visiblemente molesto, encaró a Ovi por su conflicto abierto con Bryant Myers, encendiendo nuevamente una rivalidad que parecía dormida, pero no enterrada.
Testigos aseguran que Anuel no se guardó nada. Entre gestos duros y un tono desafiante, habría lanzado insultos directos, llamando a Ovi “payaso” y “estúpido”, mientras lo acusaba de revivir una carrera que, según él, ya no generaba impacto ni dinero. En esta versión amplificada, Anuel dejó claro que no considera a Bryant Myers parte de su liga, y que cualquier intento de traerlo de vuelta al foco mediático le resulta innecesario y provocador.
La escena se volvió aún más intensa con la presencia de los vehículos de Anuel en el lugar, atrayendo miradas curiosas, teléfonos grabando y un ambiente que rozaba lo explosivo. Aunque no pasó a mayores, la sensación fue clara: bastaba una palabra más para que todo se saliera de control. Ovi, rodeado de su gente, no retrocedió, pero tampoco respondió con la misma agresividad, dejando el aire cargado de tensión sin resolver.
Como era de esperarse, las redes sociales estallaron minutos después. Fanáticos divididos, teorías cruzadas y opiniones encendidas colocaron los nombres de Anuel AA, Ovi y Bryant Myers en el centro del debate urbano. Para muchos, este episodio no es un simple cruce de palabras, sino el inicio de un nuevo capítulo en una guerra musical que aún no ha mostrado su punto más alto.
En el mundo del reguetón, los encuentros nunca son casuales y las palabras nunca son inocentes. Y tras esta noche en Miami, queda una pregunta flotando con fuerza:
¿quién será el próximo en responder… y hasta dónde están dispuestos a llegar?
